Esta década es inaugurada por el mítico single de ESPLENDOR GEOMÉTRICONecrosis en la polla (Tic-Tac/EG.1981). A causa de los instrumentos que se utilizaban (cintas magnéticas y osciladores básicamente), los sonidos eran ásperos, chirriantes y extremadamente agresivos. En estos años comienza a introducirse en España material japonés, más barato. Nace la música electrodoméstica.
Los mismos MACROMASSA publican la cassette El regreso de las botellas de papá Nódulus (LMD, 1984), en la que su habitual y heterogénea fórmula a base de jazz, rock y electrónica da paso a un nuevo código situable en la modalidad electrodoméstica gracias a su personal tratamiento de elementos como el VL Tone, las reverbs de muelles y las cajas Mattel.
Otro factor que determinaría, además del sonido, la difusión de la música electrónica española durante los ochenta es, por supuesto, la cassette. Con los ochenta, entre otras tantas cosas, llega también vía Japón, el grabador multipistas para cinta magnética. Por otra parte, la SGAE empieza a controlar la edición musical y la suma de impuestos dispara los gastos de las publicaciones en vinilo, al mismo tiempo que la cassette evoluciona y se empiezan a comercializar las Aiwas y las Tascams, dobles pletinas a precios populares. Gracias a tan fascinantes aparatitos, cualquiera puede montarse su propio estudio de grabación en casa, hacer tantas copias de sus obras como se le antoje y, en consecuencia, convertirse en editor y distribuidor de su producto, amo y señor de una diminuta, liliputiense discográfica... aunque quizás el término más adecuado sería el de cassettográfica. Al boom de los sellos independientes le sucede el boom de los sellos unipersonales, y a ello contribuyen igualmente el auge del mail-art, al cual se integra la cassette como obra de artista, la aparición de organizaciones internacionales para el intercambio y la venta de cintas por correo, de entre las cuales destaca la canadienseCLEM (Contact List of Electronic Music), y publicaciones como el boletín belga Cassette Gazette. Son tiempos de euforia en los que resulta relativamente fácil vender entre 500 y 1.000 ejemplares, toda una época marcada por un formato que se prolongará hasta la imposición, ya en los noventa, del CD.
De esta manera, empiezan a proliferar infinidad de sellos como IEP, Toracic Tapes, ECDP, Fusión DE Producciones, STI, Artifact, Necronomicón, Esplendor Geométrico Kassettes, ICD, Home Gimnasio, Auxilio De Cientos, Proceso Uvergraf dirigido por Juan Teruel y responsable del seminal recopilatorio Conspiración, Fenici, Frenetic, E=P=C=I, Ortega y Cassette, Extensión SVL, Clonaciones Petunio, Grand Mal Ediciones (antes 1984 Cintas), LMD, Duplicadora o Las Cintas del Fin (estos cuatro últimos unidos después en 4 Sellos). Casi tantos como fanzines: Autøprødukt, Syntorama, Trepidación, Destape, Cloruro Sónico, El Rollo Higiénico, Consuelo de Tontos, IEEE 488, Código Mutante, El Papel de la Merienda, Fenici...No es de extrañar, pues, que tan rápidamente establecida estructura de edición/distribución/difusión underground, a la que debe sumarse la proliferación de radios libres como la emblemática Radio Pica, facilitara el asentamiento de un fecundo panorama artístico en el que tuvieron cabida nombres propios: -Eduardo Polonio, Juan Teruel, Francisco López (aka El Internado), Marcelo Expósito, Francisco Felipe (aka La Otra Cara de un Jardín), Leo Mariño, Jorge de León, Carlos Rubio, Juan P. Monreal, Higinio G. Reus (colaborador puntual de Esplendor Geométrico), Alberto Lateral, Luis Delgado (Mecánica Popular, que llegó a grabar un LP,¿Qué sucede con el tiempo? (Discos Esplendor Geométrico), en 1989), Juan Carlos Martín, Alberto del Moral, Pablo Giménez, Luis Lozano, Félix Menkar, Fernando Matamoros, Carlos Casademont -, nombres enigmáticos: - Ejumboeke, El Coleccionista de Poliedros, Sonar, Los Hechos (más tarde convertidos en Juan Camp Experience),Fisodo 13.4, Graphices Arts, Mugics, Due (también conocidos como Duodeno y Duodécimo), Somnium, Huellas, Codex, Proletkult, Krivoi Rog, Abrera, Dix Ferro, El Sueño de Hyparco, Escupemetralla, Das Synthetische Mishgewebe(una suiza y una alemana instaladas en nuestro país que contaron con un long play, The harvest of magnetism (1988), en Discos Esplendor Geométrico),Zymotic, Conjunto Vacío, Ieximal Jelimite, Simulador de Heridas, Una Cierta Radio, Aztec Airlines, Galicia, Idee du Femelle (aka Arcueil), La Seducción del Intelecto, Kalashnikov, Tecdor Mental, Palais Garnier, Zusamenwachsen, Mataparda, Sinusoidal, IIª Época del Hombre -, nombres con siglas: - FSM (antes Secreto Metro), ACME, FDT, C307, MAD, ZOV, ECU, SLURP, UHP, nombres graciosos: Una Solución Final, El Enterrador Enterrado, La Matansa del Serdo, Mente Oxidada, Programación Infantil, La Santa Alianza, Ambulatorio Secreto, Ritos Para Margaritos, Decúbito Supino, Oh-Casio-On, L'Akstremaunció, Salcedo SA, Sección de Investigaciones Sin Sentido, Acústicos Santiaguez, El Raíl Real, Minoría Tzara, Juventudes Apátridas, Depósito Dental - e incluso nombres quilométricos: - Mi Propia Industria, Mi Propia Cultura, Mi Propio Dios .
Detrás de muchos de estos apelativos se ocultaban creadores polifacéticos de formas cambiantes, algo muy similar a lo que sucede hoy día en el ámbito de la música de baile electrónica, por lo que la mayoría fueron utilizados para encabezar una única cassette. Otros, sin embargo, forjaron sólidas (y subterráneas) carreras, llegando, muy pocos, a editar sus trabajos en vinilo e incluso, los menos, en CD.
Miguel Angel Ruiz (Madrid, 1964) es uno de los audio-artistas electrónicos cuya trayectoria comprende más de dos decenas de cintas, una cantidad tan sólo comparable a la producida por el incombustible y andujano Rafael Flores (Comando Bruno, Extraños Días Felices, International Mail Music Group, El Sopor, Psy Falange...). Empezó en 1982 grabando cassettes de la forma más artesanal que pueda imaginarse, registrando pistas con su Korg MS 10 mediante la supresión, vía esparadrapo, de la cabeza de borrado de su radiocassette. En 1984 editaría, en su propio sello Toracic Tapes y como Orfeón Gagarin, su debut homónimo, un compendio de géneros - de lo ambiental al más descarnado ruidismo industrial, del cut-up abstracto al loop étnico - que gozaría de cierta repercusión en los circuitos experimentales, la suficiente como para animarle a continuar una política desenfrenada de lanzamientos, tanto en Toracic como en diversas marcas nacionales y extranjeras, bajo distintos pseudónimos: Funeral Souvenir, Ventral Metaphor, Proceso Uvergraf, Programación Gagarin, Técnica Material, además de como Orfeón Gagarin y Miguel A. Ruiz. De entre todos esos títulos, Kedr (Toracic Tapes, 1987), La noche del anhídrico (Toracic Tapes, 1987), El niño carburador (Línea Alternativa/Underzero, 1990), Heringsmusik (Old Europa Café, 1991), Gift of fire (Línea Alternativa, 1991), Biscuit circuit (Bestattungsinsitut, 1991), Vasarely (Hyades Arts, 1992) o el muy farmacéutico Halibut Vaporub (Tragic Figures, 1990) forman ya parte de la pequeña historia de la música electrónica española. De hito debe considerarse la aparición, en 1991 y firmado como Miguel A. Ruiz, del LP Encuentros en la tercera edad, que sería apadrinado por el mismísimo Asmus Tietchens en su discográfica Hamburger Musik Gesellschaft y grabado en los Audiplex Studios de Hamburgo, con Tietchens y Otto Bekker repartiéndose las labores de producción. Tres años después, y en colaboración con Hyades Arts y Línea Alternativa, se editaría el CD recopilatorio de Orfeón Gagarin Contestación capilar. En los últimos tiempos, Miguel Angel Ruiz se ha decantado por la faceta más techno de su trabajo, la que avanzara en Propaganda state(Línea Alternativa, 1992), y, en el pasado año 96, rubricó como Exhaustor un brutal CD para Línea Alternativa repleto de ritmos implacables y efectos ácidos. Entre sus próximos proyectos, ya totalmente contextualizados en la actual escena dance, figuran colaboraciones con Resonic y HD Substance.
Luis Mesa también ha cobrado múltiples apariencias. Ya como Recursos Ajenos, Merz, Merzan (en compañía de Zan Hoffman), Técnica Material (con Miguel Angel Ruiz) o simplemente como Luis Mesa, este madrileño, que nació en 1963 y viene generando sonidos indómitos desde 1982 al mismo tiempo que conduce su sello IEP(Investigaciones, Estudios y Proyectos), ha desarrollado una muy especial fascinación por la poesía acústica en la que la utilización de las reverberaciones y la recreación de espacios con múltiples planos de presencias sonoras juegan un papel esencial. Entre el ambient más vertiginoso y una electroacústica lírica, en su currículum pueden encontrarse registros henchidos de texturas subyugantes como El sueño, Aibre o Bronce arena. En el recopilatorio Audioscope, gusta de definir su obra como "el sonido por el sonido". Ahora, otros dirían que lo suyo es el aislacionismo precoz.
Más al sur, geográfica y musicalmente hablando, en Granada concretamente, Javier G. Marín y Ani Zinc dirigían el sello Auxilio de Cientos, quizás el que gozó de mayor proyección comercial gracias a la distribución de Nuevos Medios y a la mayor accesibilidad, siempre dentros de los parámetros de la vanguardia electrónica, de la que hacían gala los combos estrella de la casa: Diseño Corbusier Marín y Zinc, que publicarían dos LP's, Pérfido encanto y El alma de la estrella, Twilight Ritual, Bene Gesserit y Neo Zelanda (Ani Zinc en solitario), cuyo único LP, Mix zelanea, no lograría superar el impacto de su histórico single Paso hambre. Lo más destacado de Andalucía junto a Rafael Flores.
Siguiendo la costa mediterránea hacia el norte, nos encontramos con una Barcelona ochentera de actividad efervescente. Todas las fábricas de vinilo que en los setenta sirvieran de refugio para progresivos laietanos han cogido los bártulos y se han trasladado a la capital del reino. En consecuencia, la cassette se convierte en moneda de cambio habitual en el circuito underground. Cada día surgen y desaparecen nuevos grupos: Klamm, Error Genético, Monochemie, Xeerøx, La Fura Dels Baus y Escupemetralla son algunos de los más representativos, la interacción entre los integrantes del colectivo vanguardista de la ciudad alcanza cotas de promiscuidad mareantes y, entre la vorágine, cuatro nombres, los mismos que formarán parte del LP Cuatro grupos de Barcelona resplandecen con luz propia: Avant-Dernières Pensées, 32 Guajar's Faragüit, Camino Al Desván y Melodinámika Sensor.
Las indispensables cassettes Arte deshecho (1984 Cintas, 1984), Nachtmusik/Total distorsión (Grand Mal, 1984) y Descomposition elemental (3AP, 1986), auténticas obras de arte tanto en lo gráfico como en lo sonoro, el LP Radiante porvenir (Discos Esplendor Geométrico, 1986) y el LP compartido con Comando Bruno Muestras sin valor (Discos Esplendor Geométrico, 1986) conforman el legado que nos ha dejado Antón Ignoranthttp://www.geocities.com/SoHo/Gallery/4771/musica.htm (ex-miembro también de Secreto Metro, Disipados, Macromassa, FSM y Raèo, actualmente en Audiopeste) en su encarnación como Avant-Dernières Pensées. Tomando el nombre de la pieza homónima compuesta por Erik Satie en 1915, Ignorant estrenaba proyecto y sello con una producción a medio camino del collage y el ruido puro, Arte deshecho, para inmediatamente después centrarse en un mayor depuramiento del sonido y una búsqueda insaciable de melodías oníricas cuya cumbre alcanza, en opinión de muchos, con la pieza Nachtmusik, que él define como "una propuesta a favor de un muzak nocturno y electrónico". José Miguel López, tenaz cronista y explorador de sonidos sintéticos, hacía especial hincapié en los desarrollos formales de Avant-Dernières Pensées con las siguientes palabras: "Para Ignorant, la forma es un parámetro fundamental de la música. No se sujeta a ninguna en concreto, ya que cada propuesta precisa su propia forma, pero ésta existe y es además el soporte necesario. Dicho de otra forma: se acabó eso de empezar a grabar ruiditos que he generado con mi cassette a mi antojo. Eso está bien, pero hay que hacerlo creativo. La forma permite un molde que contenga las ideas. Si a eso se añade la fantasía de un desarrollo imaginativo, el resultado es música de mucho calibre."¿Hace falta añadir más? Pues sí; simplemente destacar la fructífera tarea de Ignorant como editor de exquisitas cintas con sus sellos 1984 Cintas y Grand Mal Ediciones, entre ellas la deliciosa colección de trece cassettes de un minuto de duración que, con la obligada utilización del autoreverse, comprende volúmenes de 32 Guajar's Faragüit, Luis Mesa, Polonio, Rafael Flores y Víctor Nubla entre otros.
Mario Ruiz, de nombre artístico Sorollsec (Ruidoseco en catalán), era 32 Guajar's Faragüit. La suya era una ritualidad rítmica, repetitiva y drónica, estructuralmente cercana a la de Esplendor Geométrico y los SPK más contundentes, aunque formalmente tratada con sonoridades menos metálicas y un mayor número de acotaciones melódicas que lo distanciaban eones del salvajismo tribal de los de Arturo Lanz. 32 Guajar's Faragüit (Ortega y Cassette, 1983), Artilogía vocevérsica (Ortega y Cassette, 1984), Crom 48 (Sorollsec, 1985), Programarrax (Esplendor Geométrico Kassettes, 1986) y Theobromanía (1986), su contribución a la serie C-1 de Grand Mal, son, junto a sus tres cortes en 4 Grupos de Barcelona, los testigos de un talento del que poco se supo a posteriori. Una auténtica pena.
Camino Al Desván fueron el dúo formado por María Dolores García y Jordi Cabayol, trío en sus últimos tiempos con la incorporación de Jesús Melcon. Si su música no pasaba de ser una inteligente contemporaneización en el medio electrónico de discursivas clásicas contemporáneas, su rol como propietarios de dos cassettográficas básicas, Ortega y Cassette y Extensión SVL, les hizo ganar el cielo entre el respetable - que era poco, por supuesto, pero no por ello menos respetable -. Hoy día, registros como 581 (Ortega y Cassette, 1983), Violines y trompetas/Una fuente inservible (Edicions d'Artista, 1984), Camino Al Desván(Ortega y Cassette, sin fecha), Sin título (ni fecha, Ortega y Cassette) y Concierto en Transformadors (Esplendor Geométrico Kassettes, 1985) forman ya parte del recuerdo.
Y, completando este veloz repaso a la abarrotada escena barcelonesa, Melodinámika Sensor. Visto y no visto, Javier Hernando debutó con una cinta,Melodinámika Sensor, que, pese a haber sido concebida entre 1982 y 1983, lo que le otorga la categoría de pionero, no vería la luz hasta 1984, gracias a Ortega y Cassette. Súbitamente desapareció, se marchó al extranjero para dejarse embriagar por los en aquel entonces ultimísimos aires de la electrónica de vanguardia y a su vuelta, en 1985, cedió tres depurados temas a 4 Grupos de Barcelona, abandonando el registro ruidoso de su primera entrega para adentrarse en territorios más frondosos y llenos de matices. A ellos les siguió de nuevo el silencio más sepulcral, al menos en lo que a actividad editorial se refiere, hasta 1991, año en que, ya como Javier Hernando, publica Destellos mercuriales en Toracic Tapes, una obra a la que sucedería, en 1993 y en el mismo sello, Kirliania, su última entrega hasta la fecha.
Hubo más, por supuesto, mucho más: más sellos, más grupos, más fanzines, más colectivos... Los ochenta españoles resultaron ser tan fructíferos como fugaz la persistencia de tantos hallazgos, tantas emociones, tanto talento... y, en más de un caso, tanta poca vergüenza. El asentamiento del CD como formato rey para la plasmación de músicas, la estandarización de los sonidos sintéticos japoneses, la progresiva popularización de la aséptica new age entre audiencias otrora ávidas de caos ruidosos y experimentación sin compromiso, la profesionalización de unos y el abandono por aburrimiento, por desánimo, por agotamiento, de otros acabaron de sopetón con el sueño de una España Electrónica a la cabeza de las vanguardias europeas. Se acabó la fiesta. Sí, ahí siguen Esplendor Geométrico, Francisco López y Macromassa, siempre rebasando el margen de la actualidad para situarse en la órbita de los clásicos.
MOLI CHIU